Emprender un negocio es uno de los más importantes riesgos que una persona puede tomar en su vida. A pesar de haber realizado todos los estudios preliminares sobre el producto, la plaza, el mercado, y haber sido muy meticulosos al identificar los riesgos, siempre existe la incertidumbre de cómo se va a comportar tu sistema de negocios en tiempo real. En esta realidad hay dos posibles escenarios: el retorno de recuperar tu inversión, incluso a partir del segundo o tercer mes de operaciones, así como también, ganancias nulas o incluso pérdidas durante varios meses.
Problemas externos
Hay que tener mucho cuidado de no enfocarse en los problemas externos para justificar nuestra éxito o nuestra falta del mismo. Por el contrario debemos ser muy objetivos para determinar hasta que punto nuestra gestión operativa llevó al negocio al estado actual.
Es ascender hacia una ladera para realizar mountain surf y al llegar al filo, darte cuenta que en lugar que una llanta o una tabla de surfing has llevado un carrito de compras.
La diferencia entre un negocio y el autoempleo
Aun cuando Robert Kiyosaki, es tiene sus seguidores por un lado y por otro detractores de sus principios financieros, personalmente su definición de un negocio como, “un Sistema” que trabaja para ti”, considero de las mas acertadas. Un verdadero negocio debería poder prescindir de ti, en cualquier momento sin que dejes de percibir los mismos o mejores ingresos a través él. Estoy totalmente de acuerdo que un “negocio” que depende de ti para funcionar es mas bien un autoempleo, y es muy peligroso.
Durante los momentos de crisis, una empresa pensada para comportarse como un negocio real, maneja indicadores que pueden revisarse para hacer ajustes gradualmente a fin de que ésta tome su curso normal.
Cuando tienes una empresa que depende demasiado de tí aun cuando tengas trabajadores que hagan la mayor parte del trabajo pesado, por seguro esta va a sufrir tarde o temprano, e incluso te dejará muy agotado hasta el punto de desear seriamente abandonarla.
¿Volver a ser empleado?
El punto decisivo en el que un “empresario” dueño de un autoempleo se plantee la idea de regresar a ser un empleado. Empieza especialmente cuando el dinero escasea y aparentemente ya se ha intentado “todo” sin embargo sus propios ingresos, créditos, o flujo de caja no logran mantener viva la empresa sino que cada vez se vuelve mas tedioso su mantenimiento. Es cuando el recuerdo de la época en que cobraba un “sueldo fijo” sin estarse preocupando de proveedores incumplidos, clientes morosos, garantías, etc. Le endulza el porvenir de un deseo por dejarlo todo y volver a ese “cuadrante” de ingresos.
Por otro lado, es muy raro ver a una persona que tenga un “sistema” pensar en algo como ello, pero básicamente lo que podemos encontrar en esos casos es una ausencia de paciencia y suficiente tiempo para analizar los indicadores del negocio (o identificarlos en lo peor de los casos) y tomar las mejores decisiones para corregir a tiempo cualquier fluctuación negativa.
Personalmente me parece triste que por un lado un empresario no decida ajustar su modelo para convertirlo en un verdadero sistema de ingresos y por el otro lado el “socio” o accionista de un negocio que piense en retirarse del mismo en vez de rescatarlo, cuando todavía es posible.
Una solución que bastante efectiva es la de reinventarse (marca, producto, modelo de negocio), por otro lado, analizar y determinar cual es la fuente real o fuentes donde se originan nuestros problemas actuales (acá debemos dejar de echar la culpa a los empleados, pues somos nosotros los que contratamos, entrenamos y verificamos), buscar nuevas oportunidades, conseguir inversionistas, entre otros.
¿Has estado en esta situación? ¡Cuentanos tu esperiencia!